domingo, 3 de febrero de 2013

Una mañana de domingo.

Una mañana de domingo de los años 80 en mi barrio era de lo más entretenida...a veces íbamos al catecismo, en la Iglesia de Nuestra Señora de Fátima,  dónde nos juntábamos la mayoría de los niños del barrio. Al salir, íbamos corriendo al pasadizo, dónde  estaba ubicado "Sabio", nuestro proveedor oficial de golosinas  y en el que nos "dejábamos" la paga del domingo...en mi caso una moneda reluciente de 100 pesetas!!!! (Hoy 0,60 cts. de €..). Lo mejor de todo es que me daba para postalillas  de cualquier tipo de colección...y para chuches!! Toda una hazaña!
Después nos juntábamos en la "plazo". No nos podíamos perder el espectáculo de todos  los fines de semana.."El Afilador", con su música de reclamo popularmente conocida y que se tocaba con un Chiflo, y a eso de la sesión vermouth, una pareja de gitanos del barrio aledaño, con su cabra "bailaora"  y un organillo, que amenizaban con su espectáculo los mediodías,  para sacarse unas monedas...
..y ahí era dónde venía lo mejor...ya que la gente se asomaba a las ventanas para  lanzarles  unas pesetas, y como no siempre estaban al tanto de dónde caían, ahí estábamos nosotros para hacer un rastreo y con un poco de suerte incrementar la paga!
La verdad es que éramos unos niños ingeniosos y siempre estábamos mirando la forma de sacarnos algún extra..vergüenza teníamos la justa así que no nos temblaba  el pulso para ir a junto "Mari Carmen", el ultramarinos del barrio, pedirle unas cuantas cajas de fruta vacía, y en un santiamén, montábamos un puestecito  dónde  tratábamos de vender lo que ya no nos servía, viejos comics, juguetes, postalillas, canicas....lo que fuera...pero nada...estábamos muy lejos de convertirnos en empresarios de éxito como en breve lo sería Amancio Ortega.

Estas etiquetas para ilustrar esos domingos. A ver qué os parecen!